¿Te imaginas no tener que depender del giro de la puerta para distribuir el baño? ¿Y despreocuparte de los portazos provocados por las corrientes de aire, además de poder regular al centímetro su apertura? Estas son algunas de las ventajas que puedes conseguir con una puerta corredera. Se trata, en definitiva, de un gran cambio para el funcionamiento de tu casa por dos razones: la circulación se hace más fluida y sacarás más partido al espacio disponible –por cada puerta ganas 1,5 m² de superficie libre.
Black and Milk | Interior Design | London
¿Qué es un casoneto para puertas correderas y cuáles son sus ventajas?
Un casoneto es un armazón metálico que facilita la instalación de la puerta corredera, evitando hacer un doble tabique para crear la cámara donde se oculta la puerta cuando está abierta. El armazón te lo da todo listo: desde el marco para la abertura de la propia puerta, hasta el casoneto o cámara donde se desliza la hoja.
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La principal ventaja de instalar una puerta corredera con casoneto es que evita hacer una pared doble o un revestimiento paralelo para crear la cámara, lo que implicaría más gasto, más tiempo de ejecución y mayor espesor de pared.
Otra ventaja es que este sistema permite aprovechar el espacio de un solo hueco para colocar dos puertas contrapuestas.
Una de las desventajas de este sistema es que más caro que instalar una puerta abatible. Además, del lado del armazón no puedes poner interruptores, ni enchufes, ni apliques, ni colgar cuadros. Tampoco permite el paso de tuberías.
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¿Cómo se instala una puerta corredera con un casoneto?
Lo ideal es que se contemple dentro de la reforma, ya que para instalarla hay que abrir un hueco de algo más del doble del ancho de la hoja. Esto supone demoler parte del tabique y ampliar la altura del dintel unos centímetros. Por ejemplo, para instalar una puerta corredera de 72,5 cm de ancho hay que abrir un hueco de 153 cm de ancho.
Liliana Millán-Arquitecta
En la imagen, un ejemplo de estructura para puertas correderas Orchidea Basic, de la empresa de Barcelona Maydisa
Si solo te interesa instalar una sola puerta, valora la posibilidad de optar por una corredera de superficie en lugar de un casoneto. Piensa que, además de tirar el tabique, habrá que desmontar la puerta existente, los tapajuntas, los rodapiés o tocar revestimientos, como pueden ser los azulejos en el caso de un baño o cocina. A estos trabajos habrá que sumar la reparación de toda la pared para que los enfoscados y enlucidos queden igualados y regulares.
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¿En qué casos conviene hacer una puerta corredera con casoneto?
Una obra nueva o una reforma son las situaciones ideales para instalar estos armazones para puertas correderas. Su ubicación y mano de apertura se tienen que prever durante el proyecto para determinar si hay espacio para la estructura.
Se pueden instalar tanto en tabiques de ladrillo como de yeso laminado, entre 10 y 12,5 cm de espesor. El albañil es el que se encarga de recibir este armazón y de acabar las paredes con morteros de cemento o con yeso, en el caso de los tabiques de ladrillo; o con placas de yeso si se trata de tabiques de yeso laminado.
Más ideas e inspiración en la sección ‘Reformas’ de la Revista Houzz España
¿Qué tipo de puertas se pueden poner con el sistema de casoneto?
Todas las puertas estándar que hay en el mercado, tanto de madera como de cristal. Del trabajo final de colocación de las puertas, burletes antipolvo, tiradores empotrados y tapajuntas se ocupa el carpintero.
Este sistema también admite puertas dobles y puertas paralelas para que las hojas se superpongan solo de un lado, aunque en este caso se necesitaría una pared de 17 cm de espesor.
Liliana Millán-Arquitecta
Si solo se tiene espacio para una sola estructura, puedes optar por un sistema de puertas contrapuestas que permite que una puerta entre en la estructura por un lado y la segunda, por el otro –el armazón está abierto por los dos lados. El tabique en estos casos debe ser de, al menos, 17 cm de espesor. Es perfecto para habitaciones contiguas.
Susanna Cots
¿Cuánto me va a costar poner una puerta corredera con casoneto?
El precio final depende de la marca. Un casoneto genérico puede costar alrededor de 110 €, mientras que uno de marca como el de Maydisa para una puerta de ancho útil de 70 cm, sube a 202 €. A esto hay que añadirle el precio de suministro y colocación, que oscilará entre 185 y 280 €. A este monto hay que sumarle la demolición, unos 12,5 € por m².
Luego, añade la puerta. Con molduras y el tirador instalado, una puerta lacada de DM tiene un precio, como mínimo, de 220 €.
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